Y Nolan lo volvió a hacer

VALORANDO A...

Ficha técnica

Título original: Inception.
Director: Christopher Nolan.
Guión: Christopher Nolan.
Productora: Warner Bros Pictures.
País: Estados Unidos / Reino Unido.
Reparto: Leonardo Di Caprio, Joseph Gordon-Levitt, Ellen Page, Tom Hardy, Ken Watanabe, Cillian Murphy y Marion Cotillard.

Análisis crítico

Argumento: Cuando vi por primera vez las 'promos' de esta película, me dije a mí mismo que tenía una pinta estupenda, aunque, como siempre, recelé; sin embargo, en cuanto averigüé que su director era el genial Christopher Nolan, supe al instante que esta cinta iba a ser, sin lugar a dudas, una de las mejores del año. Y no me equivoqué. Origen es, con diferencia, una de las películas más redondas que he visto en los últimos tiempos. Aunque la trama es considerablemente compleja (con esas fronteras tan difusas entre los mundos oníricos y el real, y las trampas del subconsciente), se resuelve de un modo ameno y sencillo, con las dosis justas de acción (no todo va a ser "sesuda" reflexión sobre lo que es real y lo que no -o en qué nivel de sueño te encuentras-), suspense e intriga para que te mantenga en tensión constante durante las más de dos horas que dura el filme, al cual podemos dividir en tres partes bien diferenciadas. La primera tiene un cierto regusto a Ocean's eleven, con la formación del equipo de especialistas y un millonario financiando por detrás su operación; la segunda se asemeja, en buena medida, a Matrix (mundos artificiales que simulan la realidad para engañar a la mente del hombre); y la tercera se basa por completo en la exploración del subconsciente de Di Caprio, así como sus obsesiones, miedos, arrepentimientos... Una mezcla que, fácilmente, podría haber sido desastrosa, pero que Nolan consigue conjugar con suma maestría (¡para algo se ha pasado diez años escribiendo el guión!), quedando una película convincente, nada pretenciosa, divertida e incluso, si me apuras, realista. Nota: 9,5.

Actores: Sin duda alguna, éste es otro de los puntos fuertes de Origen. Nolan ha sabido reunirse de un elenco excelentes de intérpretes veteranos con otros más jóvenes, pero que no desentonan en ningún momento. En este sentido, quisiera alabar el trabajo realizado por Joseph Gordon-Levitt, al que no veía desde la sit-com Cosas de marcianos, y que me ha sorprendido tanto por su cambio de registro (serio, formal, decidido, con clase, recursos y notable presencia) como por su propia capacidad de actuación. También resultan loables los papeles del irlandés Murphy, quien, a pesar de no disfrutar de muchos minutos en el largometraje, logra en ocasiones eclipsar al mismísimo Di Caprio; el japonés Watanabe, tan sobrio y correcto como siempre; y la francesa Cotillard, magistral como la perturbada Mal. Por supuesto, tampoco me olvido de la aparición estelar de Tom Berenger, ni de la solvencia de Tom Hardy (pese a que no termina de convencerme como el personaje pícaro que se supone que es, le da un aire simpático a la cinta que rompe con la seriedad del resto). ¿Y qué tal Di Caprio? No es, ni mucho menos, uno de sus mejores papeles, pero demuestra una madurez interpretativa inconmensurable que le otorga credibilidad a su protagonista. Quizá otro actor le habría sacado más jugo a su Cobb, el cual, pese a todo, no desentona con el espíritu de la cinta. Nota: 8,5.

BSO: Como ya sabéis, siento una terrible predilección por Hans Zimmer, quien, para mi gusto, ha compuesto algunas de las mejores bandas sonoras de los últimos 20 años. No obstante, mi "pasión" por el compositor alemán no me impide ver (o escuchar, en este caso) la realidad de su propuesta para Origen. Obviamente, sus piezas son, para variar, muy correctas, acompañando a la perfección a la gran mayoría de las escenas (sobre todo a las de mayor tensión, como la de la furgoneta en el puente o la del ascensor), aunque dejan un regusto agridulce, una sensación de que Zimmer podría haber ofrecido algo más, sobre todo en lo que a originalidad se refiere. No en vano, esta BSO recuerda a horrores a anteriores composiciones del teutón, como, por ejemplo, los hilos musicales de las dos entregas del Batman de Christopher Nolan. Con todo, y aunque el genio de Zimmer no se manifieste en toda su plenitud, hay que reconocer que su trabajo es más que digno, debiendo aplaudirse la utilización que realiza del Non, je ne regrette rien de Édith Piaf. Nota: 7.



Dirección artística y técnica: En los trailers de Origen se apreciaban unos efectos especiales muy trabajados y, efectivamente, no defraudan al espectador. Al igual que ocurre en Matrix, los recursos digitales empleados no resultan barrocos o excesivos, ni tampoco gratuitos; todo lo contrario, aportan la dosis necesaria de espectacularidad que precisa la película, apareciendo en los momentos adecuados, cuando el guión lo permite o exige (por ejemplo, la primera construcción onírica de Ariadne y, muy especialmente, los paseos sin gravedad o por paredes y techos). Asimismo, la puesta en escena (soberbios el hotel y la fortaleza alpina) y la iluminación contribuyen de manera decisiva a crear esa ambientación, esa atmósfera de suspense e incógnita que caracteriza a Origen, la cual brilla especialmente por su sobresaliente montaje. Nota: 9.

Lo mejor: La apasionante trama (resuelta de modo brillante), que permite a todos los actores lucirse en sus respectivos roles; el montaje, que añade buenas dosis de tensión y emoción al filme; y los efectos especiales, dignos de verse en una pantalla de cine.

Lo peor: Que tanto a Di Caprio como a la BSO se les podría haber sacado mucho más partido.

Anecdotario personal

- La peonza acabará cayéndose (el que haya visto la película, sabrá a lo que me refiero :P).

- En este último sentido, me encantó la reacción de la sala. Todo el mundo alucinó con esa escena (y eso que me pareció muy previsible).

- ¿Rodó Nolan las dos películas de Batman con objeto de realizar 'castings' para esta producción? Seguramente no, aunque a veces lo parezca. No en vano, Watanabe, Murphy o el insigne Michael Caine (todos ellos presentes en Origen) colaboraron con el realizador británico en su saga del Caballero Negro, al igual que el compositor alemán Hans Zimmer.

- Dos momentos para el recuerdo: el beso entre Gordon-Levitt y Ellen Page (que logró que más de uno arrancara a aplaudir por la genial ocurrencia del primero) y el lanzagranadas de Tom Hardy (un hombre práctico: si estás en un sueño, ¿por qué no aprovecharlo para tener un arsenal en condiciones, en vez de simples pistolitas?).

- Por cierto, menudas defensas más 'chustas' crea la gente con su subconsciente. Yo jamás apostaría por soldados con metralletas, sino por silenciosos ninjas, saiyans que destruyeran todo con un kame hame ha, velocirraptors ávidos de sangre humana, depredadores con todo su equipamiento o Freddy Krugger, según me diera.

- No entiendo el trauma de Di Caprio con Cotillard. Sinceramente, no creo que tuviera la culpa de nada (y hasta aquí puedo leer...).

- Un dato curioso: Cotillard, tras dar vida a Édith Piaf, vuelve a protagonizar una película en la que la cantante francesa tiene una especial relevancia.

- El mundo es un pañuelo: en una misma sesión me encontré a la ex novia de mi hermano, a la ex de mi amigo José Carlos y al mencionado José Carlos :P

- ¿Lo mejor de la velada? Las buenas nuevas de Chema (mi enhorabuena de nuevo, amigo).

Nota general

Un 9, esto es, película de visionado imprescindible.