De auténtica vergüenza

Quisiera ponerme serio por un momento y denunciar un asunto muy grave que ha ocurrido estos días en Sevilla. Hace una semana tenían lugar las Oposiciones a Auxiliar Administrativo del Ayuntamiento de Sevilla. Habían pasado cinco años desde el último proceso selectivo, y más de siete mil personas se presentaban tras meses e incluso años de intenso estudio, repletas de ilusión y esperanzas. Cuál no fue su sorpresa cuando se encontraron con esto:

El Ayuntamiento reparte por error las respuestas en una oposición

El Ayuntamiento de Sevilla repartió exámenes con varias respuestas señaladas en el examen de las oposiciones para auxiliar administrativo que se celebraron el pasado domingo. Los opositores consideran que ésta es únicamente una de las muchas anomalías de este examen y se están movilizando a través de internet para impugnar la prueba.

La plantilla con las respuestas marcadas se repartió en el aula de la Facultad de Matemáticas, en Reina Mercedes, donde se celebraba el examen para las personas que padecen alguna minusvalía. Según informaron ayer a este periódico fuentes municipales, la irregularidad responde a un error en el proceso de fotocopiado de los exámenes y sólo fueron cinco preguntas las que aparecieron con las respuestas señaladas.

El Ayuntamiento sostiene que durante la prueba el tribunal negoció con los alumnos la opción de que esas preguntas no contaran en la nota final, de manera que este error no influiría en el resultado. Los opositores, en cambio, aseguran que el número de preguntas con las respuestas indicadas era de 18, desde la pregunta 42 hasta la 60 y que ésta sólo fue una de las muchas irregularidades de la jornada.

El examen del domingo ha generado una movilización por parte de las personas que se presentaron, que han decidido impugnarlo. Los foros de internet dedicados a las oposiciones y las páginas web de algunas academias están canalizando estas protestas. Los opositores aseguran que, en primer lugar, el examen se hizo en lápiz y los opositores no recibieron ninguna copia de la prueba, es decir, salieron de las aulas sin ningún documento que acredite cuáles fueron sus respuestas de cara a un posible recurso posterior.

"Cualquier persona puede modificar mi examen sin que yo pueda probar las respuestas que puse. He hecho varias oposiciones de este tipo y en todas me había llevado una plantilla con mis respuestas. El sábado, un día antes de este examen, me presenté a las pruebas de la Junta. Como suele ocurrir en estos casos, las hojas eran autocopiativas y yo me quedé con una copia", explicó a este periódico una joven opositora.

Otra de las quejas de los que hicieron el examen fue el contenido de las preguntas. Un porcentaje importante de las 60 cuestiones se referían a la ley orgánica del Poder Judicial, que, según los opositores, no estaba incluida en el temario. Otros de los examinandos aseguran que hubo filtraciones del examen antes del mismo. Uno de ellos asegura en un foro que vio a una joven en el Metro con el examen que hizo después, mientras que otra de las personas que se presentó confiesa que tenía en su poder una copia de la prueba desde hace un mes. La mayoría de los opositores denuncia además que la organización fue caótica, especialmente en la sede de la Universidad Pablo de Olavide.

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Me resulta indignante que estas cosas ocurran. Jugar así con los sentimientos de muchas personas, que han tenido que hartarse de estudiar para tratar de lograr un futuro, es DEPLORABLE. Tenemos un alcalde y un gobierno municipal que son de auténtica vergüenza, que han dejado las arcas de Sevilla en la ruina; han protagonizado diversos escándalos (¿o ya nadie se acuerda de las proezas del Delegado de Juventud y Deportes, Lolo Silva?); y que ahora se ríen en la cara de mucha gente que solo quiere TRABAJAR.

Señor Monteseirín, por favor, anule el examen y váyase a tomar viento fresco de una vez con todo su gabinete. Son lo peor que le ha pasado a Sevilla. ¡LÁRGUENSE!