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martes, 23 de agosto de 2011

La Puerta del Infierno

En un desierto muy lejano, más allá del Mar Caspio, se halla un enorme agujero en el suelo. Podría ser un accidente geográfico más, sin demasiada importancia; sin embargo, la verdad es mucho más escalofriante. Las personas que han tenido el valor de acercarse han visto salir de ese agujero cantidades ingentes de un fuego que jamás se apaga. Generaciones de nómadas han visto con pavor cómo las llamas del lugar han seguido ardiendo durante años, sin remitir ni un solo segundo. Por eso mismo, los habitantes del desierto llaman a ese lugar Derweze o Darvaza, que en su lengua significa 'La puerta', es decir, la puerta hacia el fuego eterno, hacia los infiernos:

¿Os ha gustado esta introducción a lo Iker Jiménez? No, no os asustéis. Lo que habéis contemplado no es una puerta a los infiernos, aunque realmente lo parece, ¿no es así? Tampoco creáis que la imagen es falsa: ese cráter, llamado el Pozo de Darvaza, existe de verdad, en el desierto de Karakum, en Turkmenistán. Y sí, por sorprendente que parezca, sus llamas no se han apagado jamás desde que se encendieron allá por 1971.

Lógicamente, todo tiene una explicación muy sencilla. Dicho desierto es muy rico en gas natural y, en aquella década, la URSS decidió explotar dicho recurso natural. En 1971, sin embargo, los geólogos se toparon por sorpresa, mientras perforaban, con una inmensa caverna subterránea, que se tragó literalmente sus equipos de excavación y sus tiendas. El resultado de aquel accidente fue un enorme agujero de 60 metros de diámetro (70, según otras fuentes) y 20 de profundidad, que empezó a expulsar gas natural a la atmósfera.

Los geólogos decidieron entonces prenderlo para, primero, evitar que la región se contaminara y salvaguardar la salud de sus habitantes (pues dicha sustancia es venenosa); y, segundo, para intentar habilitar la zona para una nueva perforación y explotar nuevos pozos de gas que pudieran hallarse por los alrededores. Los científicos soviéticos confiaban en que el incendio terminase en un par de días. Hoy, cuarenta años después, el fuego en el Cráter de Darvaza sigue activo y nadie sabe a ciencia cierta cuándo se apagará. Ved aquí el sobrecogedor espectáculo que nos ofrece la también conocida como Puerta del Infierno:



A día de hoy, el Pozo es una atracción turística más de Turkmenistán, aunque su Gobierno está planeando apagarlo. La razón, por supuesto, es económica: hay demasiado gas en esa zona para no explotarlo y, además, las autoridades temen que el incendio no sólo esté consumiendo el gas que hubiera en aquel cráter, sino también el de yacimientos cercanos. Así que, quizá, dentro de poco no podamos disfrutar de esta peculiar maravilla del mundo, pero, al menos, nos quedarán para el recuerdo las fantásticas imágenes que nos ha dejado durante estas últimas cuatro décadas.

3 comentarios:

Selerkála dijo...

¡Madre mía! ¡Un pedo planetario gigante! jajaja
No, en serio, es una pasada.
¿De dónde sacas estas curiosidades? ^^

Alberto Zeal dijo...

Pues de aquí y de allá. Me gusta explorar Internet y encontrar este tipo de cosas, aunque algunas, sencillamente, las conozco gracias a documentales, libros o noticias ^^

Findûriel dijo...

Increíble, no lo conocía... alucinante aporte, Alberto. Pensé que ibas a hablar del hoax de la 'grabación del sonido de los condenados del infierno', supuestamente grabada en una excavación de Siberia.
http://youtu.be/U-iqDeIgGKM